Las cuatro cuerdas que dan color a la melodía y que trabajan codo con codo con el ritmo.
El tren de la banda que puede llegar a pasar desapercibido, pero sin embargo es el director de todo y si no está, todo se para.
Son solo cuatro cuerdas,
pero son las más grandes.
Aprender a tocar el bajo significa aprender a guiar tu grupo por los diferentes estilos y poder aportar ese toque diferenciador a las canciones. Clases individuales o grupales, dirigido a todas las edades, adaptadas según los niveles que durará un curso lectivo ajustadas a las necesidades del centro.